mascaras

Podemos observar el rostro del bebe sin imaginar como cambiara cuando pase el tiempo, tal vez se parezca al papá o tal vez a la mamá... pero lo que no sabes es del otro rostro que cambia, pero no lo vez.

Cada vez que estas con alguien, tu personalidad muta de distintas formas, son las mascaras que todos llevamos, que se adaptan a lo que vivimos... iluso es el que cree que es original, no sabe que es subordinado a su entorno, nunca será igual para todos.

El bebe es el más original, no juzga, ni pide más que lo básico, pero sabes que si le das un par de años, se transforma en un pequeño ogrillo, tal vez que busca su propia conveniencia... aprovechador...

Las mascaras que traemos son tan verdad como la ropa que tenemos puesta, queremos ser de una forma, tal vez sobresalir y es posible que solo en la intimidad sabes quien eres... pero recalco, las mascaras no son malas, sin importar todas las veces que cambien, somos nosotros mismos y punto.

Hay una escena en la película vértigo, de alfred hitchcock, donde la mujer (la amiga del protagonista) se había transformado por su furia, refleja su imagen en la ventana y vio sin querer su mascara, la del enojo y frustración... ¿será que tenemos pánico de vernos a nosotros mismos?